¿Te has dado cuenta la importancia que le hemos dado a todo aquello que vemos?
No importa lo que veamos ni en donde lo veamos, puede ser en las vallas publicitarias, en la televisión o en las diferentes revistas pero es todo esto lo que influye de manera relevante en nuestra forma de actuar y pensar.
¿No me crees?
Si no dime ¿Cómo es que hoy la mayoría de chavas tienen las uñas pintadas de un color que hace un año ni de loca se lo aplicaban? O ¿Porqué usan esos zapatos que antes juraban que solo las abuelitas los usaban?, puede que lo hagan porque lo vieron en los nuevos productos de una revista o porque a la modelo se le miraban increíble.
Si todavía dudas, entonces como explicas el hecho de que de un momento a otro todos los hombres decidieron usar la marca Hollister, no creo que todos se hayan puesto de acuerdo.
Ves como muchas de las cosas que promocionan forman parte de nuestras actitudes o de nuestro clóset.
Lamentablemente la publicidad no siempre deja cosas buenas, menos a la mujer que se deja llevar por todo aquello que ve, un ejemplo es el hecho de que hoy en día son muy pocas las que no llevan un lápiz labial en su bolso y lo triste es que ya no lo ven como la influencia de la publicidad, si no que lo ven como algo indispensable.
Las inducen a mancharse la cara de productos que lo único que hacen es esconder aquello que en realidad las hace lucir increíblemente bien, aquello que en realidad son.
¿O es que nunca me enteré que nosotras las mujeres naciamos con un poco de rubor en el rostro?
Pero una vez más los hombres se salvan ya que somos las mujeres las que caemos en todas esas trampas, o ¿el chavo que les gusta a todas, se aplica sombras, lápiz labial, máscara etc, para verse tan bien? (espero la respuesta sea no).
Es por eso que si eres mujer, te invito a que te manches la cara, pero que lo hagas de cosas que en realidad valen la pena. Aquellas cosas con los cuales no pierdes, ni ganas dinero, pero si ganas tiempo ya que no duran un día, si no toda la vida, por lo que te ahorras la desmaquillada de todas las noches. En tus mejillas en vez de rubor porque no pruebas un poco de alegría, cambia aquel lápiz labial que dura todo el día por uno que no borre esa sonrisa de tu cara, puedes aplicar también un tono de autenticidad y por último darle brillo a tus ojos con algo de honestidad. El que más se recomienda es el lápiz labial ya que nunca sabes si en el día de alguien más, vas a ser la única persona que le regale una sonrisa.
Te aseguro que no necesitamos de productos que resalten nuestra belleza, si no que son nuestras acciones lo que reflejan lo increíble que podemos llegar a ser. Así que el tiempo que pierdes aplicando tu maquillaje utilízalo para determinar qué es lo que te falta o que puedes mejorar para poder ser alguien auténtico.
Ángela García
Imágen extraída de: photobucket.com
